lunes, 9 de septiembre de 2013

Elizabeth.
Por Naila.
Ayer mi ex-vecina Elizabeth se mudo, ella no es de acá, es de Guadalajara, vi el camión de la mudanza y me dio gusto por ella, creo por primera vez la vi sonreír, no reír lo que se dice reír, menos una carcajada, nunca durante 6 años vi que hiciera eso, pero ayer veía que sonreía.
Eso me alegra, porque luego, luego se veía que ella no era feliz acá, que extrañaba su gente, su lugar de origen; no tuve una gran amistad con ella, ni si quiera una amistad, simplemente era mi vecina, pero se le veía que no era feliz.
Al ver cómo iba dirigiendo a las personas que la ayudaron con su mudanza, se veía cansada pero también contenta, ella vivió situaciones muy duras acá,  y creo al irse dejó en esa casa su dolor, su sufrimiento, aunque no creo que se le olvide lo que vivió por lo menos ya no le dolerá tanto como antes, porque la distancia, como bien dicen cómo ayuda.
Elizabeth dentro de las cosas que vivió siendo mi vecina fue perder a un hijo, nunca supe si fue niño o niña, creo eso fue irrelevante después de todo, pero la criatura nació y estuvo mucho tiempo en el hospital, luchando por su vida, finalmente partió, pero a Elizabeth se le veía el dolor y sufrimiento en su cara, en su caminar, en su mirada.
Ella ya tenía otra hija, que tampoco  me acuerdo de su nombre y eso que se acaban de ir, porque siempre vivió encerrada, aislada, no sé si era su personalidad o ese dolor que cargaba no la dejaba vivir, como la mayoría de la gente vive, con un ir y venir por la vida, ella lo hacía pero con un dolor acuestas, con sufrimiento y eso creo no es vivir.
Fernando es su esposo, él todo el día trabaja y ella siempre tan sola, con su hija grande y su dolor acuestas; casi no la veía pero cuando la veía siempre con una gran tristeza, que bueno que se fue, creo allá estará bien, olvidará lo que vivió, porque siempre lo dijo, que no le gustaba estar en Puebla.
No sé ni a dónde se fue, porque no se despidió, pero no importa si se despidió o no, lo que quiero y deseo es que esté bien a dónde se haya ido, pero que ya no tenga ese dolor, esa tristeza que no le dejaba ni un solo momento.

Hoy su casa ya está vacía, sin sus cosas, pero creo que sigue llena con toda su tristeza, sus historias, su dolor, y ojalá ahí se quede todo eso, paraqué Elizabeth este bien…

4 comentarios:

  1. Mis sugerencias, piendo que al principio haces mucho enfasis en que estaba triste, y después contenta, puedes utiliza sinónimos. Y como que no me convenció que irse de Puebla sería la solución a sus problemas, saludos.

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  2. Fabiola, como que no me queda tan claro quien es Elizabeth.
    Estoy de acuerdo con Eva María es que no parece que irse de su casa vaya a disminuir el dolor, ya que lo que describes va mucho más allá del espacio físico en el que vivía. ¿A ti que te hace sentir eso que nos dices?
    Me parece que a veces pones algunas comas donde no van y eso hace que la lectura no sea fluida. Ejemplo: "porque luego, luego se veía".
    Saludos.

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  3. Hola Fabi!
    Necesito elementos de tensión que me permitan disfrutar la lectura, por ejemplo: desde dónde veía a Elizabeth, en el jardín, espiando en la ventana, regresando del super. Falta detallar personajes, infiero que la persona que observa a Elizabeth es mujer, se vale de meras apreciaciones personales porque en todo momento utiliza "vi, veía" para referirse a la triste Eli, y eso en lo personal no me convence. Tal vez el cuento funcionaría mejor si dos personajes hablan acerca de la mudanza e intercambian puntos de vista que coincidan y que difieran, hasta una pelea verbal puede haber.
    No le gustaba estar en Puebla desde que llegó o por la muerte de su hij@? Muchos cabos sueltos, al igual que el esposo y la hija mayor, podrías incluirlos como secundarios.
    El párrafo final tendría más fuerza al inicio, obviamente cambiando la redacción y con tintes metafóricos: "la casa se vacía, como Elizabeth... "

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  4. Coincido con los comentarios de Sergio, María y Eva (aunque a mí me queda clarísimo porqué puede o no sentirse abrazado por una ciudad, falta mostrarlo). Algunas aclaraciones:
    1. Por lo general, no se usa punto en el título.
    2. Hay que releer en voz alta para poner los signos de puntuación que corresponden. Por ejemplo, el primer párrafo dice:
    "Ayer mi ex-vecina Elizabeth se mudo, ella no es de acá, es de Guadalajara, vi el camión de la mudanza y me dio gusto por ella, creo por primera vez la vi sonreír, no reír lo que se dice reír, menos una carcajada, nunca durante 6 años vi que hiciera eso, pero ayer veía que sonreía."
    Y podría decir:
    "Ayer se mudó, ella no es de acá, es de Guadalajara. Vi el camión de la mudanza y me dió gusto por ella. Creo que por primera vez la vi sonreír. No reír lo que se dice reír, menos una carcajada: nunca durante 6 años vi que hiciera eso. Pero ayer veía que sonreía."
    3.Fuera de los acentos (QUE CORREGIRÁN SUS COMPAÑEROS), lo más importante del cuento tiene que ver con la relación de los personajes y sus sentimientos. De un personaje, Elizabeth, no conocemos ni podemos conocer realmente lo que pasa por su cabeza puesto que la narración la hace su vecina, quien tampoco la conoce. Ergo, ¿cuál es el personaje en el que sí podemos ahondar? Exacto: en la vecina narradora. Ella dice sentir pena por Elizabeth y dice, también, que le da alegría verla contenta por marcharse aunque, según la narradora, nunca le importó realmente conocerla. ¿No es eso lo suficientemente raro? 1)le da alegría que se vaya, 2) siente pena por ella y 3) nunca le importó. Creo que en esta complejidad sicológica de la personaje narradora es donde está el cuento: ¿no se va Elizabeth, acaso, porque toda la gente de la ciudad a la que llegó es como su vecina: distantes, incapaces de entablar una amistad? Incluso cuando falleció su hijo, su vecina, la que ahora dice sentir pena y alegría, ni siquiera se acercó a preguntarle cómo estaba: todo, según la narradora, lo percibe al verla, por su caminar, por su mirada. ¿Entonces por qué le importa hasta ahora? ¿Por qué siente pena y alegría ahora si antes no le importó? ¿Por qué la incapacidad de acercarse? Creo que ahí está el cuento. Y sí, se puede mostrar muy bien el sentimiento de culpa de la personaje narradora, ése que diría que ella hizo todo lo posible pero mostrándole al lector que no hizo cosa alguna. La incapacidad de entablar una relación interpersonal y la culpa. Ahí está el cuento.

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